Mensaje del 2 de julio de 2012 en Medjugorje, Bosnia-Herzegovina
"Queridos hijos, de nuevo les pido maternalmente, que se detengan por un momento
y reflexionen sobre ustedes mismos y la transitoriedad de su vida terrenal. Por
lo tanto, reflexionen sobre la eternidad y la bienaventuranza eterna. Ustedes,
¿qué desean, por cual camino quieren andar? El amor del Padre me envía a ser
mediadora para ustedes, para que con amor materno les muestre el camino que
conduce a la pureza del alma, del alma no apesadumbrada por el pecado, del alma
que conocerá la eternidad. Pido que la luz del amor de mi Hijo los ilumine, que
venzan las debilidades y salgan de la miseria. Ustedes son mis hijos y yo los
quiero a todos por el camino de la salvación. Por lo tanto, hijos míos, reúnase
en torno a mí, para que les ayude a conocer el amor de mi Hijo y, de esta
manera, abrirles la puerta de la bienaventuranza eterna. Oren como yo por sus
pastores. Nuevamente les advierto: no los juzguen, porque mi Hijo los ha
elegido. ¡Les agradezco!"
Que blog tan maravilloso.¡Enhorabuena Ingrid.
ResponderEliminarDios te bendiga.